jueves, 1 de abril de 2021

La AECC señala la inequidad en los programas de cribado de cáncer de colon y piden que se mantengan a pesar de la pandemia

· El porcentaje de población no invitada a participar en los cribados de cáncer colorrectal en 2020 osciló entre el 30% y el 90% debido a la Covid-19. · Es una prioridad medir el impacto COVID en los pacientes con cáncer tal y como fue aprobado en el Consejo Interterritorial del pasado 24 de febrero · El cáncer es la primera causa de muerte prematura entre los 30 y los 69 años, franja en la que se incluye las personas en edad de riesgo de desarrollar un cáncer de colon · El objetivo de los programas de cribado es reducir la morbilidad o mortalidad prematura asociada al cáncer de colon · La detección precoz disminuye la mortalidad a corto plazo entre un 30% y un 35%. En España, esto equivale a salvar unas 4.000 vidas · En España, la población de riesgo medio (hombre y mujeres entre 50 y 69 años) es de 12.508.589 · El cáncer de colon es el tumor de mayor incidencia en España con 38.790 casos entre hombres y mujeres. En Castilla y León en el último año se han diagnosticado 2.522 casos nuevos (105/100.000 habitantes). · Durante la primera ola de la pandemia se suspendieron todos los programas de cribado, si bien se observa que la actividad se está retomando a diferentes ritmos, pero siempre con las máximas medidas de seguridad · Es seguro realizarse las pruebas, tanto por las instalaciones como por los profesionales que las realizan, y se recomienda a la población que acuda a la cita cuando se reciba la invitación. · En la Comunidad Autónoma de Castilla y León en 2019 se hicieron 383.801 invitaciones a realizar las pruebas preventivas de cáncer de colon, respondiendo a la invitación 36,40%. 31 de marzo de 2021 La Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), con motivo del Día Mundial Para la Prevención del Cáncer de Colon, solicita que se mantengan los programas de cribado de cáncer de colon a pesar de la pandemia. La paralización y ralentización de los programas de cribado están retrasando el diagnóstico de los cánceres de mama, colon y cérvix lo que aumenta las posibilidades de detectar la enfermedad en estadios avanzados. En el Plan COVID-Cáncer, aprobado unánimemente por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud el pasado 24 de febrero, ya se contempla la necesidad, no solo de mantener los programas de cribado, sino de implementar otras 12 medidas entre las que se encuentra analizar en profundidad el impacto real del COVID en los pacientes con cáncer. Los programas de cribado se incorporaron a la Cartera de Servicios del Sistema Nacional de Salud en el año 2013, aunque en algunas Comunidades Autónomas se llevaban desarrollando desde 2009. Su implantación ha sido desigual a lo largo de estos años generando inequidades en España. Así había personas que no podían acceder a un programa de cribado, y por lo tanto tenían menores posibilidades de detección precoz, solo por el hecho de vivir en una Comunidad u otra. Los datos obtenidos para España antes de la pandemia, proporcionados por la Red de Cribados de Cáncer del año 2017, muestran que sólo el 44,5% de los casi 12 millones de personas en edad de riesgo (entre 50 y 69 años) estaban cubiertas por un programa de cribado de cáncer colorrectal. El impacto de la pandemia aún no está evaluado. La última información disponible para la provincia de León, correspondiente al año 2019, indica que la participación efectiva sobre el total de las invitaciones enviadas para realizar el cribado de cáncer colon, fue solamente del 34,5%. El cáncer es igual para todos, pero no todos son iguales frente al cáncer El cáncer es la primera causa de muerte prematura entre los 30 y los 69 años, franja en la que se incluye las personas en edad de riesgo de desarrollar un cáncer de colon. De ahí la importancia de que los programas de cribado de cáncer de colon sean accesibles a toda la población por la capacidad de reducir la morbimortalidad por este tipo de tumor. La AECC defiende que todas las personas de riesgo medio, es decir, entre 50 y 69 años tienen derecho a participar en esta medida preventiva. Este derecho solo estará garantizado cuando los programas de cribado poblacional alcancen una cobertura, esto es, que se reciba una invitación a participar, cercana al 100%. Ramón Reyes, presidente de la AECC señala que “todas las personas deben tener las mismas oportunidades frente al cáncer y estas oportunidades comienzan por garantizar el derecho a participar en programas de cribado. De ahí que sea esencial que se mantengan los programas de cribado de cáncer de colon a pesar de la pandemia”. El presidente también señalo que “hay que hacer un esfuerzo por garantizar este derecho porque de lo que estamos hablando es de salvar vidas”. Los programas de cribado han demostrado científicamente que son capaces de disminuir la mortalidad a corto plazo entre el 30% y el 35% lo que equivale, en España, a salvar unas 4.000 vidas. Para conseguir el verdadero impacto positivo de los programas de cribado es necesario alcanzar una participación de la población diana superior al 65%. El cáncer de colon y el programa de cribado poblacional Según el Observatorio del Cáncer AECC, el cáncer de colon es el de mayor incidencia en España, por delante de mama o próstata, con 38.790 casos diagnosticados en el 2020. Se trata además del segundo tipo de cáncer que más muertes causa al año en España. En el 2020, 15.778 personas fallecieron a causa de un cáncer de colon. En la Provincia de León también es el más frecuente en diagnóstico con 509 nuevos casos en 2020 y el segundo en mortalidad con 251 fallecidos en ese mismo periodo. La buena noticia es que el cáncer de colon, junto con el de mama y cérvix, es uno de los tres que se puede detectar precozmente. De ahí la importancia de los programas de cribado poblacionales que tienen como objetivo reducir la morbilidad o mortalidad prematura asociada a esta enfermedad y mejorar su pronóstico. De hecho, este tipo de tumor tiene diferencias muy importantes en la supervivencia media a 5 años dependiendo del estadio del diagnóstico, pasando de un 90% en un estadio A (inicial o localizado) a menos de un 8% en un estadio D (avanzado con metástasis). El diagnóstico se realiza mediante el Test de Sangre Oculta en Heces (TSOH): una prueba no invasiva y nada molesta para detectar lesiones que podrían derivan en un tumor maligno. Durante la primera ola de la pandemia se suspendieron todos los programas de cribado si bien se observa que la actividad se está retomando a diferentes ritmos, pero con todas las medidas de seguridad. No obstante, no hay datos del impacto del COVID en los programas de cribado y no se sabe la cobertura actual en España. En la comunidad de Castilla y León se suspendieron las pruebas en la primera época de la pandemia, pero a partir de junio se reanudaron los cribados, con el objetivo de rescatar en 2021 incluso aquellos que habían quedado suspendidos. La Sociedad Española de Epidemiología (SEE) recomienda participar en el cribado cuando llegue la invitación ya que, tanto las instalaciones como los profesionales de los centros dónde se lleva a cabo los cribados y las colonoscopias, han desarrollado protocolos seguros para evitar la posible infección por COVID. Para asegurar se puede seguir sin interrupciones ni demoras los cribados hay que hacer un llamamiento a la población para que siga las recomendaciones sanitarias frente al Coronavirus (mascarilla, distancia física, lavado de manos, limitación de aforo). Solo frenando el virus se podrá garantizar seguir con la actividad de cribado con normalidad. Un Acuerdo Contra el Cáncer que una a toda la sociedad La AECC pide que toda la sociedad española se una a este acuerdo para que se pueda garantizar el derecho a que toda población en edad de riesgo pueda acceder a los programas de cribado de cáncer independientemente de su lugar de residencia. El objetivo último es acabar con la inequidad que provoca la desigual implantación de estos programas de cribado y que todas las personas tengan las mismas oportunidades de enfrentarse al cáncer.