miércoles, 27 de diciembre de 2017

Las farmacias de Castilla y León ya pueden dispensar medicamentos recetados en Asturias y Murcia, que ya son interoperables como otras 9 Comunidades más

· Los pacientes de estas Comunidades pueden retirar sus medicamentos con receta electrónica en cualquier oficina de farmacia de dichos territorios




· Desde la puesta en marcha de la interoperabilidad en Castilla y León el pasado junio, son ya 34.159 las e-recetas que se han tramitado en Castilla y León de ciudadanos llegados de otras Comunidades





27 de Diciembre de 2017.- Las farmacias de Castilla y León ya pueden dispensar medicamentos recetados en Asturias y Murcia, las dos Comunidades que desde está semana ya disponen de receta electrónica interoperable.

Castilla y León ya se había incorporado a esa red de Comunidades con e-receta interoperable el pasado verano, convirtiéndose en uno de los principales hitos de la profesión en esta Comunidad a lo largo de 2017. Con la incorporación del Principado de Asturias y de Murcia son ya 11 las Comunidades interoperables entre sí: Castilla La Mancha, Canarias, Extremadura, Aragón, Comunidad Valenciana, La Rioja, Castilla y León, Galicia, Navarra, Asturias y Murcia. Está previsto que se incorporen próximamente más Comunidades: Cataluña, Cantabria, País Vasco y Andalucía.

La presidenta del CONCYL-Consejo de Colegios Profesionales de Farmacéuticos de Castilla y León, Raquel Martínez, ha señalado que la incorporación de Asturias es un hecho especialmente relevante, teniendo en cuenta que es “territorio limítrofe a Castilla y León y que el desplazamiento de ciudadanos de una Comunidad a otra en épocas vacacionales es elevado. De ahí la importancia de que otras Comunidades limítrofes, como Madrid o País Vasco, se incorporen cuanto antes a esta red interoperable”.

Este sistema conectado permite por tanto a los ciudadanos retirar su medicación en cualquiera de las oficinas de farmacia de las 11 Comunidades Autónomas que ya son interoperables. Desde su puesta en marcha el pasado mes de junio y hasta finales de noviembre, son ya 34.159 las recetas electrónicas que se han tramitado en las 1.629 farmacias de Castilla y León procedentes de ciudadanos llegados de otras Comunidades Autónomas. Mientras tanto, en ese mismo periodo, otras Comunidades interoperables han tramitado 27.226 recetas electrónicas de ciudadanos de Castilla y León.

Los beneficios que la interoperabilidad trae consigo son indudables, tanto para los pacientes como para los profesionales sanitarios. Por un lado, facilita el acceso a los tratamientos de los pacientes que no se encuentran en su Comunidad y permite al farmacéutico el seguimiento de dichos tratamientos. Todo esto con la vista puesta en mejorar la adherencia terapéutica y contribuir a la seguridad del medicamento a través de la detección de posibles reacciones adversas e interacciones.








Principalmente, ciudadanos de Aragón y Comunidad Valenciana
La mayoría de estas recetas electrónicas se han tramitado en Castilla y León a ciudadanos llegados desde Aragón, Comunidad Valenciana, Castilla la Mancha y Galicia.

Por su parte, los ciudadanos de Castilla y León que han retirado medicación fuera de la Comunidad lo han hecho especialmente en Comunidad Valenciana, Galicia, Extremadura y La Rioja.

Nuevas vías de comunicación “en beneficio del paciente”
A este respecto, la presidenta del CONCYL ha recordado que la interoperabilidad de la receta electrónica “sigue abriendo nuevas vías de comunicación entre las distintas Comunidades en beneficio del paciente. Por un lado, facilita el acceso a los tratamientos de los pacientes que no se encuentran en su Comunidad y permite al farmacéutico el seguimiento de dichos tratamientos”

miércoles, 13 de diciembre de 2017

MANIFIESTO DEL CONSEJO DE COLEGIOS OFICIALES DE MÉDICOS DE CASTILLA Y LEÓN

El Consejo de Colegios Oficiales de Médicos de Castilla y León, quiere manifestar su preocupación por las declaraciones del Consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, D. Antonio Sáez Aguado, en las que manifiesta su intención de plantear en el Consejo Interterritorial de Salud que los Médicos Internos Residentes (MIR) al concluir su formación especializada tengan la obligación de trabajar los dos años siguientes en la Comunidad Autónoma donde se hayan formado; una medida para paliar la falta de médicos que es un problema generalizado en España.

Ante estas declaraciones, la Asamblea General del Consejo de Colegios Oficiales de Médicos de Castilla y León reunida en la ciudad de León, quiere manifestar su desacuerdo y rechazo a esta propuesta, toda vez que en la Unión Europea existe una legislación firme y decidida en favor de la libre circulación de trabajadores y profesionales que entra en contradicción con la propuesta del Consejero.

La falta de médicos en el sistema público de salud de Castilla y León se ha convertido en un problema endémico que tiene su origen en la carencia de una planificación adecuada a medio y largo plazo sobre las necesidades de profesionales en el sector de la salud, en el injustificado adelanto de la edad de jubilación de los médicos, la supresión de la Carrera Profesional, la carencia de unas retribuciones adecuadas y de otros incentivos, como la estabilidad laboral o concursos y oposiciones con la debida regularidad.

Los médicos de Castilla y León continuarán ejerciendo en esta Comunidad tras formarse, si cuentan con los adecuados incentivos profesionales, retributivos y laborales en consonancia con la situación de los médicos del resto de la Unión Europea, con lo que se conseguirían su fijación y fidelización en nuestra Comunidad, en la que se precisan plantillas de profesionales ajustadas a las necesidades de atención sanitaria de sus ciudadanos y en donde los médicos no se vean desbordados por el exceso de trabajo que han provocado los recortes de los últimos años y en los que no se ha contado con los representantes de la profesión para abordar estos problemas, ateniéndose a criterios exclusivamente políticos y cortoplacistas que ponen en peligro la calidad asistencial que merecen los ciudadanos de Castilla y León.

Finalmente recalcar que este asunto merece una atención especial de nuestras autoridades sanitarias cuya responsabilidad es determinante, a las que este Consejo de Colegios Oficiales de Médicos de Castilla y León ofrece su colaboración decidida y comprometida para conseguir una asistencia sanitaria de la máxima calidad.




León, 12 de diciembre de 2017