miércoles, 13 de diciembre de 2017

MANIFIESTO DEL CONSEJO DE COLEGIOS OFICIALES DE MÉDICOS DE CASTILLA Y LEÓN

El Consejo de Colegios Oficiales de Médicos de Castilla y León, quiere manifestar su preocupación por las declaraciones del Consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, D. Antonio Sáez Aguado, en las que manifiesta su intención de plantear en el Consejo Interterritorial de Salud que los Médicos Internos Residentes (MIR) al concluir su formación especializada tengan la obligación de trabajar los dos años siguientes en la Comunidad Autónoma donde se hayan formado; una medida para paliar la falta de médicos que es un problema generalizado en España.

Ante estas declaraciones, la Asamblea General del Consejo de Colegios Oficiales de Médicos de Castilla y León reunida en la ciudad de León, quiere manifestar su desacuerdo y rechazo a esta propuesta, toda vez que en la Unión Europea existe una legislación firme y decidida en favor de la libre circulación de trabajadores y profesionales que entra en contradicción con la propuesta del Consejero.

La falta de médicos en el sistema público de salud de Castilla y León se ha convertido en un problema endémico que tiene su origen en la carencia de una planificación adecuada a medio y largo plazo sobre las necesidades de profesionales en el sector de la salud, en el injustificado adelanto de la edad de jubilación de los médicos, la supresión de la Carrera Profesional, la carencia de unas retribuciones adecuadas y de otros incentivos, como la estabilidad laboral o concursos y oposiciones con la debida regularidad.

Los médicos de Castilla y León continuarán ejerciendo en esta Comunidad tras formarse, si cuentan con los adecuados incentivos profesionales, retributivos y laborales en consonancia con la situación de los médicos del resto de la Unión Europea, con lo que se conseguirían su fijación y fidelización en nuestra Comunidad, en la que se precisan plantillas de profesionales ajustadas a las necesidades de atención sanitaria de sus ciudadanos y en donde los médicos no se vean desbordados por el exceso de trabajo que han provocado los recortes de los últimos años y en los que no se ha contado con los representantes de la profesión para abordar estos problemas, ateniéndose a criterios exclusivamente políticos y cortoplacistas que ponen en peligro la calidad asistencial que merecen los ciudadanos de Castilla y León.

Finalmente recalcar que este asunto merece una atención especial de nuestras autoridades sanitarias cuya responsabilidad es determinante, a las que este Consejo de Colegios Oficiales de Médicos de Castilla y León ofrece su colaboración decidida y comprometida para conseguir una asistencia sanitaria de la máxima calidad.




León, 12 de diciembre de 2017